¿Educar para la libertad?

Autor: Jesús Domingo Martínez

 

 

Estos días estamos viendo que son ya varios miles los padres de familia que han optado por la objeción de conciencia para que sus hijos no asistan a las clases de Educación para la Ciudadanía, una asignatura imbuida por la ideología de genero, impuesta por el Gobierno como punta de lanza de su contrarreforma educativa. Al mismo tiempo, se registran continuas críticas al contenido de esta asignatura que se aleja de las recomendaciones dadas por el Consejo de Europa para que todos los alumnos europeos tengan una formación cívica similar, basada en el respeto de los derechos humanos. No deja de resultar llamativo que en ningún país europeo se haya impugnado esta directiva, por la sencilla razón de que a ningún Gobierno se le ha ocurrido aprovechar la ocasión para adoctrinar a los alumnos en función de sus respectivas ideologías políticas, como ha hecho el Gobierno presidido por Rodríguez Zapatero. La obsesión del partido socialista por modelar la sociedad a imagen de sus postulados relativistas y laicistas, le ha llevado a convertir esta asignatura en un instrumento de formación de las conciencias, invadiendo el campo que es propio de las familias como lo reconoce la misma Constitución. Sin duda, con las amenazas de la Ministra se demuestra que lo que no se persigue es una educación para la libertad.