Evangelio

Autor: Gustavo Daniel D´Apice

Webs del autor en: catholic.net y Dialogando

 

Levantaste al paralítico
y al leproso lo curaste, 
a la samaritana calmaste
la sed que te adjudicaste.

Vino Nicodemo a verte
en la noche de su vida,
y tu le alumbraste el camino
renaciendo a nueva vida.

Te enterraron con los muertos
tumba de ricos te dieron,
por ejercer tu reinado
te vieron resucitado.

Te levantaste de la tumba
ante soldados absortos,
que mintieron temerosos
lo que vieron con sus ojos.

Por unos 40 días
estuviste con los vivos
en estado ya glorioso
instruyendo a los discípulos.

Llegó al fin Pentecostés,
el Espíritu descendió,
y es testigo por siempre,
que Jesús resucitó.

Llega el tiempo de la Iglesia,
en el mundo con fervor,
anuncia el misterio de Cristo
que murió y resucitó.
(va y proclama que el Cristo,
si murió, resucitó.)

Se acerca la Parusía,
Cristo vuelve para juzgar,
a los vivos transfigurados,
y a los muertos ha de resucitar.

Unos irán con Su Padre,
otros lejos se colocarán.
Lo que sí es que Cristo ha venido,
Todo en Todo lo será.

Por siempre contemplaremos
la Vida, Verdad y Amor,
al fin nos saciaremos
y nuestra sed calmaremos
sin dejar de beber.