Sufrir sanamente para dejar de sufrir

Autora: Graciela De Filippis

 



Cuando sufrimos tendríamos que detenernos unos minutos a pensar por qué
sufrimos, cuál es el motivo que nos hace daño, cuál es la razón.


La mayor parte de la gente vive pendiente de las actitudes de los demás, de
las respuestas, y ante reacciones inexplicables o que no son las esperadas
se abre paso al sufrimiento.


Nuestra ansiedad nos lleva a imaginar que los otros nos responderán de una
manera determinada y cuando esto no sucede nos sentimos mal, nos
entristecemos.


Debemos asumir que cada persona es diferente, debemos comprender que cada
uno responde de manera distinta ante un mismo suceso.


Aquello que para uno está mal tal vez para otro sea optimo...


Vivir esperando que los que nos rodean actúen de la manera que deseamos o
respondan a un modelo mental que nosotros creamos es imposible.


Para vivir en paz debemos serenar esa ansiedad, debemos asumir que somos
diferentes, debemos amar las diferencias no sólo las semejanzas, debemos
comprender que somos egoístas si pensamos que los demás tienen que responder a nuestros deseos.


Y como dice Mateo Bautista: "Ante el sufrimiento deberíamos preguntarnos
¿Qué gano con sufrir? ¿Qué pierdo si dejo de sufrir?


Sufrir sanamente para dejar de sufrir es utilizar el sufrimiento para pasar del apego al amor, de la manipulación a la libertad, del vacío a la felicidad, del sin sentido al sentido. Es poner amor en todo sufrimiento para que me purifique".
Así desaparecerá el sufrimiento dejando como herencia el secreto de la vida.