Entre Sus manos

Autor: Gloria Leticia Sánchez García

A mi Mami

Quién pudiera, rosa linda,
darle luz a tus pupilas;
veo que la vida te escapa,
la flor de tu faz no es la misma.

Verte azul y delicada
como un ángel de cristal,
como aquella vela tal,
que va perdiendo su flama.

Quién pudiera dar fineza 
a tu oído y a tu vista;
movilidad a tu cuerpo,
laborioso como avispa.

¡Oh, mamacita querida,
quién pudiera, como niña,
refugiarme en tu regazo
y sentirme protegida!

Pero sabes?, linda flor,
mi adorada princesita,
en los campos del Señor
has sembrado una semilla.
Y en esa parcela divina
que está situada en Sus manos,
la semilla que has dejado,
Él celoso, la cultiva.

Entre Sus manos está,
la semilla de tu vida,

Él la cuida, Él la acecha 
y en su momento sabrá
si le ha de salir otra hoja,
o si empieza a cosechar.

¡Entre Sus manos estás,
tiernamente acogida,
entre Sus manos estás,
Oh, pedazo de mi vida!
¡Qué mi Señor te bendiga!