Carta a los cristianos

¡Arranca con Cristo!

Autor: Padre Gerardo Moreno

 

 

              En el lenguaje de los jóvenes, cuando quieren decir que se van, utilizan un vocablo como muy suyo: ¡Voy a arrancar! Que en otras palabras están anunciando que se marchan. 

            Cuando una persona comienza el día con alegría, full de esperanza, repleto de buen humor, solemos decir que se despertó con el pie derecho; porque ya sabemos la cara que tiene quien se despierta con el pie izquierdo. Son dichos, pero en el fondo están muy dentro de la gente y parece tener su cereza. Por cierto, ¿con cuál pie te despertaste hoy?  Si alguien anda de mal humor o con cara de cañón, como dicen los muchachos, ya sabemos con que pie despertó. Lo importante es cambiar de posición para poder despertar con el pie que te anunciará un nuevo día lleno de Buenas Noticias. 

            Conseguir trabajo inmediatamente después de haber obtenido el título universitario, es arrancar con el pie derecho, así dicen los sabios. Lograr una meta anhelada es arrancar con el  pie derecho. Ver a tus hijos sonreír, luchar por lo que ellos sueñan es arrancar con el pie derecho. Llevar el perdón en el corazón y la amistad en la sinceridad es arrancar con el pie  derecho. Desde la fe, preocuparnos más por el servicio al prójimo que por el puesto o el cargo es arrancar con el pie derecho. Decir una Buena Noticia en medio de la desesperanza es arrancar con el pie derecho. Proclamar el bien, la justicia, la fraternidad, la misericordia de DIOS es arrancar con el pie derecho.

            No nos vaya a suceder como aquel hombre que estaba esperando que su jefe arrancara para él arrancar, resulta que el jefe nunca arrancó, y por supuesto, el hombre tampoco. No esperes que los demás arranquen para tú arrancar. Quizás no haya iniciativa por parte de los demás, pero tú tienes que tomarla, sí, tomar iniciativas con sabor a vida, a sueños recién estrenados y a esperanza que no se acaba. 

            Se puede tener un mal día, algo puede salir mal en el trabajo, quizás un familiar pase por un momento difícil; pero eso no se puede superar si verdaderamente has arrancado con CRISTO. 

            Arranca con el pie izquierdo o con el derecho, pero arranca, no te quedes en el camino. ¿Vas a seguir esperando qué los demás arranquen? ¿Y si no arrancan? Es hora de arrancar con CRISTO para seguir haciendo el bien, sirviendo al prójimo sin distinción, labrando el Reino de DIOS procurando una sociedad mejor, proclamar el perdón de DIOS por encima de corazones endurecidos y castrados. ¿Qué haces ahí parado? Vente que tenemos que arrancar juntos en CRISTO e ir de dos en dos a proclamar la Buena Noticia.  ¡Apúrate, que la sociedad nos espera y CRISTO cuenta con nosotros para su obra!