Oraciones sugeridas por el Angel a los pastorcitos de Fátima

Autor: Gerardo García Helder           


Dios mío, creo, adoro, espero y te amo.
Te pido perdón por los que no creen, 
no adoran, no esperan, ni te aman.

Santísima Trinidad,
Padre, Hijo y Espíritu Santo,
yo te ofrezco con adoración profunda,
el preciosísimo Cuerpo,
Sangre, Alma y Divinidad
de nuestro Señor Jesucristo,
presente en todos los tabernáculos del mundo,
en reparación de las ofensas que se te hacen.

Por los méritos infinitos de su Sagrado Corazón
y por la intercesión del Corazón Inmaculado de María,
te pido la conversión de los pecadores.


ORACIÓN POR LA CONVERSIÓN DE LOS PECADORES

Señor, tú eres bondadoso y misericordioso,
y todo lo hiciste muy bien,
creando de la nada cuanto existe.
Señor, tú eres clemente y comprensivo,
y no quieres la muerte del pecador,
sino que se convierta y viva.
Señor, tú eres paciente y fiel,
y esperas al hijo pródigo
e invitas al justo a alegrarse a su regreso.
Señor, tú tanto amaste al mundo,
que enviaste a tu Hijo único,
no para juzgarnos, sino para salvarnos.
Señor, tú quieres que todos los hombres se salven,
lleguen al conocimiento de la verdad
y que sean uno, como tú eres Uno.
Te pido la conversión de los que, como yo, son pecadores.
Quiero unirme a tu deseo de salvación universal,
solidarizándome con mis hermanos
y emprendiendo con ellos un camino de sincera conversión.
Danos la gracia de cumplir tus mandamientos
alimentando al hambriento, dando de beber al sediento,
vistiendo al desnudo, alojando al forastero,
visitando al enfermo y al encarcelado,
descubriéndote y respetándote en la obra de tus manos.
Cambia nuestra forma de pensar y de sentir,
porque muchas veces no parecemos hijos tuyos.
Endereza y sostiene nuestro andar
ya que tú eres el Camino, la Verdad y la Vida.
Y permítenos disfrutar al final de los tiempos
del banquete que tienes preparado 
no sólo para los que te conocen y sirven,
sino también para aquellos que no han tenido esa gracia
y que, a pesar de no saberlo, también son hijos tuyos. Amén.