La bondad del hombre

Autor: Padre Francisco Baena Calvo

 

 

Confucio afirmó sabiamente: “Cuando veas a un hombre bueno trata de imitarlo; cuando veas a un hombre malo, examínate a ti mismo”.

 

Jamás tiremos la toalla en la andadura existencial que transitamos porque entonces la historia caminará hacia la “ley de la selva” y las conquistas sociales no serán nada más que “fósiles sin sustancia”.

 

La bondad de un hombre será lo único que nos haga tener esperanza en la humanidad y será la única arma capaz de llevar a este mundo a sendas cada día más auténticas de perfección.

 

Hoy las generaciones más jóvenes necesitan más testigos que maestros, más hombres buenos que economistas, más abrazos que palabras, más amigos que jueces inmisericordes...

 

No te inquietes si en la “noche oscura de tu vida” te encuentras un hombre perverso porque será la única manera que te haga mirar hacia dentro.