Contradicciones de escándalo

Autor: Padre Francisco Baena Calvo

 

El desequilibrio de las distintas partes de nuestro planeta en razón al desarrollo económico, social y cultural se convierte en nuestro mundo en el factor desencadenante y la base de todos los desequilibrios personales y sociales.

Este desequilibrio engendra lo que llamamos "Primer mundo", el "Tercer mundo" e incluso "Cuarto mundo". En definitiva, países ricos y países en vías de desarrollo; Países que generan la tecnología más avanzada y países que tienen la materia prima; países que diseñan y programan el desarrollo de las grandes tendencias culturales y movimientos tecnológicos, y países con una enorme deuda externa.

En este sistema mundial, denominada “sistema de globalización” o “pensamiento único” (Ignacio Ramonet), lo económico ha ganado poder en relación a lo político, que por medio de sus múltiples manifestaciones “legitima esta situación de sociedad no igualitaria”. En todas sus vertientes culturales, sobre todo en los medios de comunicación social al servicio del capital”, se legitima la organización social en beneficio de una élite de poder y de dominio, desprestigiando con estereotipos a todos los que quieren transformar la sociedad.

Mientras los dueños del mundo juegan a hacer de la tierra una "Tecnópolis", otros caminan a ciegas por el camino tortuoso del desequilibrio ecológico y contemplan angustiados las grandes masas de parias en su geografía de origen.

Noticias como éstas nos dejan mudos y nos recuerdan que la justicia está lejos de conseguirse en esta sociedad, caracterizada como “sistema de globalización” o “pensamiento único”:

En Europa, 40 millones de ciudadanos cobran menos de la mitad del salario mínimo.

Según la UNICEF, 600 millones de menores viven en la más absoluta pobreza.

Una de cada cinco mujeres del mundo sufren maltratos físicos o sexuales.

En el año 1988 había 33,4 millones de afectados por el Sida; en el año 2008 serán 53 millones y habrán muerto ya más de 40 millones por esa enfermedad.

Cada año, más de 2 millones de niñas entre 5 y 15 años son violadas u obligadas a prostituirse.

En el año 1975 había 8000 presos en España. En el año 1998 se acercaban a 50.000.

La Suma de los PIB de todos los países subdesarrollados (más de 600 millones de habitantes) no llega a alcanzar a la fortuna de los tres individuos más ricos del planeta.

La riqueza de las 200 personas más ricas del mundo fue en 1999 un billón de dólares, 10 veces más que los habitantes de los 43 países más pobres....

En el marco de este sistema capitalista de corte neoliberal se potencian los deseos de consumo entre la población. La contradicción consiste en que, en lugar de satisfacer las necesidades básicas -comida, bebida, vivienda, educación- se producen unas necesidades superfluas, y para producirlas se recorre a estimular los deseos consumistas.

Mientras tanto, frente a este panorama dantesco, se nos pide que ayudemos con pequeñas limosnas y donativos que puedan equilibrar la gran balanza de los pueblos.