Cabezas rapadas

Autor: Padre Francisco Baena Calvo

 

Nunca olvidaré la invasión de muerte, 
de sombras y de fantasmas en este siglo, 
nada más que en este siglo de avances, 
en este siglo de inventos, 
el sufrimiento que mana y corre por la historia, 
la historia de llanto y desgracia. 

¡Y vosotros, jóvenes encadenados por un poco de engaño, 
jóvenes ilusionistas sin memoria y recuerdos, 
vais a decirnos que todo aquello fue mentira, 
que los rostros de los niños, convertidos en humo, 
convertidos en pasto, convertidos en nada fueron inventos; 
que los corazones de los negros, de los judíos, 
no fueron sumergidos en los baúles secretos de la tierra! 

Nunca olvidaré la ola de intolerancia, 
de cansancios y de desprecio en este tiempo, 
no más allá de nuestros años de amores, 
en este siglo de amnesia, 
el correr sangre que sale y vuelve por la herida, 
la herida abierta de las lágrimas. 

¡Y vosotros, jóvenes comediantes por un plato de lentejas, 
jóvenes invadidos sin amores y sonrisas, 
vais a decirnos que todo aquello fue mentira, 
que los tambores de la dictadura danzaron liberación; 
que la creencia en un Dios bueno no se hizo pasto; 
que los amores del viento huyeron a lo lejos, sin vanidades, 
descuartizados por los verdugos de la violencia!