"Un
amigo es más que un hermano,
más que un padre. Bueno, es otra cosa,
es un compañero de ruta" (GREGOR)
A
Ignacio Ellacuría, Rigoverta Menchú, Pedro Casaldáliga,
Herder Cámara, Gandhi, Mandela... tantos testigos vivos encontrados
en las encrucijadas de esta historia nuestra.
¡Alegraos por un momento, por un solo momento
y decidme si hubo en esta tierra personas más humanas;
sí, decidme por un instante, sin pestañear, sin mucho pensar,
sin mucho mirar a vuestro alrededor, sin mucho mirar dentro,
si esta historia nuestra, esta madre tierra, esta madre milenaria,
engendró hombres y mujeres tan galanes, tan comprometidos,
tan amigos, tan sencillos, tan inquietos!
¡Regocijaos por un momento, por un solo momento
e investigad sus vidas un instante;
sí, respondedme sin titubear, sin sonrojaros,
sin muchos argumentos de pasillo, sin mucho justificar perezas,
si con ellos no perece lo mejor de este mundo, este mundo pasajero,
este mundo que se cimenta en lo certero y en lo negro,
este mundo que combate públicamente el mal y se abraza en privado,
este mundo que asesina profetas y luego les hace mausoleos,
este mundo que pide justicia y luego la acuchilla en la esquina!
¡Alegraos por un momento, por un solo momento
y decidme si puede la tierra abrazarlos para siempre;
sí, habladme por un instante, sin protocolos ni disfraces,
sin mucha soberbia en vuestros corazones, sin muchas risas,
si sus vidas no están todavía vivas, vivas en el pecho,
vivas en el combate, vivas en los pueblos, vivas en lo eterno;
si no queréis ser, al menos, una llama de sus hogueras;
al menos unas palabras de sus gargantas, un sentimiento de sus quejas!