Acercamiento a Jesús de Nazaret

Autor: Padre Francisco Baena Calvo

 

Ante la figura gigantesca de Jesús de Nazaret caben tres niveles de acercamiento.

Un primer nivel de acercamiento sería el CONVENCIMIENTO HACIA SU MENSAJE. El mensaje de Jesús, transmitido por los evangelios, se convierte para muchos en un camino de moral humana válida para los hombres de cualquier época y cultura. Su mensaje sería la fuente fundamental de los DERECHOS HUMANOS, e incorporado en la línea de los grandes hombres de la historia universal y de los grandes fundadores de religiones.

Un segundo nivel de acercamiento sería la ATRACCIÓN HACIA SU FIGURA HISTÓRICA como una bendición que ha dejado su huella en esta triste historia de la historia, cargada de crímenes, verdugos, torturadores, mentirosos y vividores a sueldo. Para muchos la admiración hacia este personaje histórico es digna de crédito al actuar en su vida con una libertad a prueba de golpes, con una defensa de lo humano que le lleva a relativizar lo más santo y las tradiciones religiosas judías, la acogida a los marginados y pecadores públicos de aquel tiempo, la llamada a vivir la plenitud y la perfección invitando a sus oyentes a mirar más allá de sí mismo y del mundo que le rodea para poner su corazón en un Dios misericordioso, que hace salir el sol sobre buenos y malos, al que llama "Abba" (papaíto), el impulso para construir este mundo de tiniebla con respecto al proyecto de Dios que pasa por la justicia y el amor hacia el prójimo, la llamada a tratar a los demás como queremos que nos traten.

Un tercer nivel de acercamiento sería LA FE PERSONAL HACIA JESÚS DE NAZARET. Este nivel incluye tanto el primer nivel como el segundo pero ven a Jesús como el reflejo del auténtico rostro de Dios, que se consuma en su muerte y Resurrección. El llama al seguimiento personal y a vivir este encuentro desde la caridad.

Sólo este último nivel legitima llamarse cristiano y puede ser capaz de dar sentido global a la existencia y a la vida humana, al tiempo que se manifiesta como el "sacramento de Dios en el mundo", uniendo para siempre la vida de Dios y la vida del hombre como una relación inviolable.