Santa Margarita de Cortona, Mayo 16

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

Etimológicamente significa "perla". Viene de la lengua griega.

Esta joven quedó sin madre a los seis años. El padre se casó por segunda vez. La madrasta la trató indignamente. Por todos los alrededores comentaban que su belleza era incomparable.

Soñaba con un príncipe azul, como suele ocurrir en la edad de la adolescencia. Sus caminos, sin embargo, la llevarían por otro derrotero muy distinto.

Un marqués la engatuzó con intenciones de que algún día sería su esposa. Y, en realidad, se convirtió en su amante. Tuvo un hijo de esta relación. Nadie nace santo. También ellos son de carne y hueso como cualquiera.

Ella era plenamente consciente de que su vida marchaba por mal camino. Un día tuvo un encuentro que la marcaría para siempre. En 1273 salió su amante de caza y no volvió. Ella, acompañada de un perro, rastreó las cercanías. El animal descubrió el cadáver de su amante.

En estas circunstancias pensó para sí misma:<<¿Me pasará a mí algo parecido por mis pecados? ¿Será éste mi fin desgraciado? Bien merecido lo tengo...>>

De vuelta a casa, lloró muy hondamente sus pecados y se entregó a una vida nueva en la que florecía la flor de la oración, el arrepentimiento de sus pecados y la penitencia por los mismos.

Quería alcanzar cuanto antes la santidad de vida que antes no había llevado. Avergonzada pero con gran intuición y fuerza de voluntad, se fue a confesar al sacerdote.

En este sentido tuvo una gran suerte con el encuentro de dos buenas señoras. Ellas mismas le condujeron al confesor, el padre Bevegnati Este sacerdote le ayudaría mucho para que encaminase sus pasos por la senda del bien. Tanto deseo tenía Margarita de ser buena que se imponía duras penitencias que tenía que suavizar el confesor.

Pasado el tiempo, se hizo terciaria franciscana. Ayudaba a todo el mundo pobre y sobre todo a las mujeres que daban a luz. Fundó un hospital para cuidarlas. "Pasaba" de las calumnias y de los chismes.

Se sentía indigna de acercarse a la comunión. El Señor la llamó <<Hija querida>>. Murió como santa el 21 de febrero de 1291 diciendo:<<Dios mío, os amo>>.

¡Felicidades a quienes lleven este nombre!

"La duda es el principio de la sabiduría" (Aristóteles).