Santa Eleonora, Febrero 21

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

Etimológicamente significa "que tiene piedad". Viene de la lengua griega.

El soplo de Dios atraviesa hasta tal punto el mundo de hoy, que muchos comienzan a salir de la pasividad para entrar en una creación común.

Esta joven vino al mundo en Francia. Sus padres eran Berengario IV, conde de Provenza y de Beatriz de Saboya.

La madre era una ferviente cristiana y muy dada a las letras.

En 1236 contrajo matrimonio en Canterbury con el rey Enrique III de Inglaterra.

Con ella se marcharon muchos familiares y conocidos en busca de una mayor fortuna. Muchos llegaron a ocupar puestos importantes en la administración pública.

Sin embargo, el favoritismo de Eleonor suscitó en seguida las envidias y una impopularidad grande contra la reina.

La cosa se hizo tan tensa que tuvieron que encerrarla en la torre de Londres.

La mala suerte no sólo caía sobre sus espaldas, sino que su marido fue hecho prisionero durante la batalla de Lewes.

Por fortuna, la reina logró salir de la Torre y se escapó a Francia con el fin de juntar un ejército que luchara contra los insurrectos y , de esta forma, librar a su marido.

Volvió a Inglaterra en compañía del legado pontificio. A partir de este momento, Eleonora tuvo mucha influencia en tiempo de su marido y a continuación con el de su hijo Eduardo I.

El soplo de Dios atravesó su alma. Por eso se fue a una abadía benedictina y se hizo religiosa en el 1276.

Su santidad creció a pasos agigantados. Su fama de santidad es enorme, aunque nunca haya sido canonizada oficialmente. Todo el mundo, si embargo, le tributa el culto que merece. Murió santamente en 1291.

¡Felicidades a quien lleve este nombre!

"De todas las ruinas del mundo, la ruina del hombre es, sin duda alguna, el más triste espectáculo" (Gautier).