San León Abril 19

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

Etimológicamente significa "león". Viene del griego y del latín.

León IX fue, sin duda, una de las figuras estelares de la Iglesia de todos los tiempos. Y lo fue porque inició una reforma que culminaría después Gregorio VII.

Dotado de una brillante inteligencia y con un poder grande de decisión, pensó que su felicidad residía en hacerse sacerdote para servir mejor al mundo. Por su familia, de alto rango, no se hubiera hecho cura. Eran nobles en Alsacia.

El mismo emperador Conrado II le hizo promesas halagadoras y tentadoras. Uno cualquiera, atraído por el dinero y la fama, hubiera seguido las insinuaciones de los padres y del emperador. El, sin embargo, lo rechazó todo por otra causa muy distinta.

Empezó su labor sacerdotal y episcopal en Toul. Su trabajo era sobre todo con los pobres y la defensa de la justicia e intromisiones del metropolitano de Worms.

La consigna de su vida era vencer el mal con el bien. Cuando murió el Papa, lo eligieron a él como sucesor en el año 1045.

Mantuvo buenas relaciones con todas las instituciones religiosas y civiles. Pero siguió el camino emprendido de reformar todo lo que no fuera digno de la Iglesia.

Así por ejemplo, atajó con fuerza y austeridad la costumbre un poco arraigada del concubinato de algunos clérigos y el empleo de la simonía. Esta era casi equivalente a una herejía. Consistía en la venta o compra de realidades espirituales o temporales inseparables de las primeras.

Siempre ha sido castigada por la Iglesia con penas severas.

Viajó a menudo por Francia y Alemania asistiendo a concilios. Fue la persona adecuada para aquel tiempo. Le tocó pasar lo suyo. Al final de su pontificado, fue hecho prisionero en 1053. Volvió a Roma ocho meses más tarde. Las condenas mutuas entre él y el patriarca de Constantinopla se anularon en 1965 entre Pablo VI y el patriarca Atenágoras en un gesto de unidad eclesial.

¡Felicidades a quienes lleven este nombre!

"Para tener a los otros contentos no hay como hacerles que cuenten historias de amor o valentía, y fingir que uno las cree" (L.F. Céline)