San
Juan Fisher Junio 20
Autor:
Padre Felipe
Santos Campaña SDB
Etimológicamente
significa “Dios es misericordia”. Viene de la lengua hebrea.
Estamos
ante una lumbrera del siglo XVI. Cuando se visita la célebre universidad de
Cambridge, Inglaterra, le viene a uno a la mente la figura del que fuera su
vicecanciller y canciller años más tarde.
Su
camino como profesor de tan afamado centro, lo dejó para ordenarse de
sacerdote a los 22 años.
La
madre del rey lo pasó francamente mal cuando enviudó por tercera vez. Dios
hizo que se encontrara con Juan. Y al ver toda su santidad y su sabiduría,
lo nombró su director espiritual.
Rochester
tuvo la fortuna de tenerlo como obispo a los 35 años. Amante de la gente y
de su conocimiento, pasó largo tiempo visitando cada una de las iglesias de
la diócesis, animando a los sacerdotes y a los fieles a seguir perseverando
en la bella vocación de ser creyentes en Cristo.
Como
persona inteligente, dedicaba cada día horas para la oración y para
escribir libros. Su vida personal, a pesar de ser obispo y canciller de la
universidad, era de una austeridad al estilo de los monjes.
Lutero
empezó a hacer de las suyas con el protestantismo. Juan, como buen soldado
y luchador, le replicaba su doctrina con libros, discursos y sermones en los
que combatía los errores luteranos.
Ante
su fuerza y muestras de virtud, el rey exclamaba:<< Ningún otro reino
tiene actualmente un obispo tan sabio y tan santo como Juan Fisher>>.
Llegó
un momento delicado en su vida. El rey Enrique VIII se divorció de su legítima
esposa para casarse con la concubina Ana Bolena. Juan se opuso a tal
matrimonio. Como respuesta a la condena de este enlace ilegítimo, el rey se
nombró a sí mismo jefe supremo de la Iglesia de Inglaterra en lugar del
Papa.
Llovieron
las amenazas contra Juan. Lo encarcelaron, intentaron envenenarlo, le
levantaron calumnias. Ante todo esto, el Papa lo nombró cardenal cuando
estaba en la cárcel. En junio de 1535 el rey lo mandó ejecutar.
¡Felicidades
a quienes lleven este nombre!
“La
sencillez consiste en hacer el viaje de la vida llevando solamente el
equipaje necesario” Ch. Wagner).