San Juan de Rivera, Enero 18

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

Etimológicamente significa "Dios es misericordia". Viene de la lengua hebrea.

Es muy curioso que este joven sevillano fuera un afortunado, no tanto porque su padre fuera virrey de Nápoles, sino porque cuando hizo sus estudios en la Universidad de Salamanca, tuvo por maestros a personas afamadas y de un gran prestigio intelectual.

Al terminar brillantemente sus estudios, se ordenó de sacerdote para servir mejor a Cristo y a la Iglesia.

Tan bueno sería que el mismo Papa Pío IV lo nombró obispo de Badajoz cuando tenía ten sólo 30 años.

Una de sus tareas pastorales consistió en erradicar todo cuanto enseñaban los protestantes. Eran otros tiempos en los que no existía el ecumenismo ni la libertad religiosa.

Para lograr esto, formó a muy buenos catequistas que iban de barrio en barrio enseñando la verdad católica en contra de la protestante.

El patrono del clero de Andalucía, san Juan de Avila, hablaba así de él:<<Estoy contento porque monseñor Rivera está enviando catequistas y predicadores a defender al pueblo de los errores de los protestantes, y él mismo les costea generosamente todos los gastos>>.

Era una persona muy campechana, sencilla y abierta a todas las clases sociales. Los mismo obreros – ¡cosa rara! – decían:<<Vayamos a oír al santo apóstol>>.

Llegó al arzobispado de Valencia sin un euro en el bolsillo. En la nueva ciudad se entregó a los pobres, al estudio y sobre todo al sacramento de la penitencia, tan descuidado por algunos cristianos en la actualidad.

No paraba mucho en la ciudad levantina, porque tuvo una preocupación grande por conocer las 290 parroquias que había en su diócesis. Las visitó once veces. Y como era hombre culto, dejó escritos 91 volúmenes de sus charlas con la gente y los sacerdotes. El nombramiento de virrey de Valencia no se le subió a la cabeza. Siguió siendo el santo de siempre. Murió en el año 1611. Fue la lumbrera de los obispos españoles. Juan XXIII lo declaró santo en 1960.

¡Felicidades a quienes lleven este nombre!

"La vida feliz y dichosa es el objeto único de toda la filosofía" (Cicerón).