San Juan de Montemarano, Agosto 4

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

             

Etimológicamente significa “ Dios es misericordia”. Viene de la lengua hebrea. 

En presencia de la infinita compasión de Dios, lo íntimo de la persona está como cautivado y puede presentir una cercanía de la santidad de Cristo.

Esta experiencia no podrás lograrla sino te pegas ratos y ratos de oración. O si no vives y trabajas pensando que Dios te quiere y te ve. 

Juan fue obispo del siglo XI.

Esta ciudad está rodeada de arboleda y es un centro agrícola de primer orden. Está en lo que fue la antigua Via Apia.

Hoy pertenece a la diócesis de Nusco, Italia. Antes había  sido sede episcopal.

El obispo electo para esta  villa fue nombrado expresamente por el Papa Gregorio VII. Juan era monje.

Se  entregó con tanto ardor a querer a la gente, sobre todo a la marginada y pobre en todos los sentidos, que llegó un momento en que los mismo obispos  hicieron de él esta magnífica definición:<<Padre de los pobres>>.

Pienso que no hay mayor timbre de gloria para un obispo que le llamen así.

Indica que había captado el Evangelio en su más bella y profunda radicalidad.

Pero fue algo más que eso. Se recuerda que, una vez consagrado obispo, se  dedicó a la agricultura.

Trabajaba para los pobres. Igual que habían hecho anteriormente los monjes de Montevirgen.

Los habitantes le recuerdan todavía, y le han levantado una  hermosa catedral para honrar su memoria. 

¡Felicidades a quien lleve este nombre! 

“A todos nos sobran fuerzas para soportar los males ajenos”(Rochefoucauld).