San José Benito de Cottolengo, Mayo 1

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB    

  

Etimológicamente significa : José: "el que se crece" y Benito "hijo predilecto". Vienen de la lengua hebrea y latina.

Este santo es lo de los más célebres en la Italia del siglo XVIII y XIX, junto con san Juan Bosco, fundador de los Salesianos. Tan grande es la fama de ambos que la ciudad de Turín, en la Via Regina , les ha dedicado un monumento al recuerdo de su labor humanitaria y educativa.

Fundó, siendo joven, el hospital de "La Divina Providencia". No creas que era pequeño. Albergaba nada menos que 10.000 personas enfermas.

No era muy inteligente. Se encomendó al gran sabio de Santo Tomás de Aquino y los exámenes los hizo muy bien. Es el San Juan de Dios de Granada. Al ver un día que una mujer moría y nadie le atendía, Dios le inspiró la idea de fundar una casa para los pobres sin dinero. Las autoridades que viven en otro mundo, pensaban que Cottolengo iba a infectar a la ciudad. Cuando lo echaron del centro de la ciudad, buscó refugio en Valdocco, cerca de Turín.

Fundó varias comunidades de mujeres y hombres entregados a esta dura labor. Les solía decir:<< Hagan alegre y agradable el trato que les dan a los enfermos. Que los que reciben sus favores y atenciones sientan el gozo de ser atendidos y nunca se sientan humillados>>.

Por su parte, él nunca se atribuía nada. Todo era obra de Dios. Decía:<<Para mí es más cierto que existe la Divina Providencia que el que exista la ciudad en que vivo>>.

Nunca llevaba un libro de cuentas. Confiaba plenamente en Dios. Sin ninguna "pasta" comenzaba a agrandar los hospitales y a hacer otros nuevos. Algo totalmente increíble para un ser que no tenga plena fe en el Señor.

No paraba de trabajar. Y, agotado, murió a los 56 años, y lo sepultaron al día siguiente de su muerte, el primero de mayo.

Su hospital sigue adelante con enfermos incurables. Antes de morir dijo:<< ¡Qué alegría cuando me dijeron: vamos a la casa del Señor>>. En 19354 fue declaro santo, un año antes que D. Bosco.

¡Felicidades a quienes lleven este nombre!

"Al buen día mételo en casa" ( Cervantes).