San Job Mayo 8

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB      

 

  

Etimológicamente significa "perseguido, despreciado". Viene de la lengua hebrea.

A este patriarca del Antiguo Testamento hay que situarlo allá por el año 2000 antes de Cristo. Habrás oído muchas veces esta expresión:<<Tienes más paciencia que Job>>.

Efectivamente, este buen amigo de su familia – tenía siete hijos y tres hijas – y con algunos rebaños fue perdiendo lentamente todo lo que tenía. Dios lo puso a prueba.

El, para que no le ocurriera nada a sus hijos, ofrecía sacrificios de animales al Señor como muestra de gratitud y de petición. También celebraba los acontecimientos de sus hijos. Estando un día celebrando la fiesta del hijo mayor, se acercó un mensajero a decirle:<< Han llegado unos guerrilleros y han matado todo el ganado>>.

Y así de forma sucesiva fueron llegando mensajeros para narrarle malas noticias.

Job, cansado de tanta desgracia exclamó:<<Desnudo salí del vientre de mi madre. Sin nada volveré al sepulcro. Dios me lo dio, Dios me lo quitó. Hágase su voluntad>>.

Era una persona íntimamente unido a los designios de Dios más que a sus propios caprichos. Esto no quita que alguna que otra vez se rebelara contra Dios y hasta quisiera verlo. Nadie nace santo.

Le sobrevino una enfermedad en la piel y tenía sueños espantosos. Llegó incluso a pedirle cuentas a Dios de lo que le pasaba. Pero cayó en la cuenta de que Dios es totalmente el Otro aunque esté en lo más íntimo de cada uno.

Una vez que terminaron las pruebas a las que Dios le sometió, el Señor le concedió el doble de todo lo que había perdido. Le concedió una larga vida y, según contaban antes, murió a los 140 años rodeado de nietos y de biznietos.

Y pedía perdón por haberse atrevido a hablar con Dios y sobre todo a pedirle cuentas

¡Felicidades a quienes lleven este nombre!

"Todo hombre está en el mundo para simbolizar algo que ignora" (León Bloy).