San Antonio Turraini, Junio 24

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB    

   

Etimológicamente significa “ florido, inestimable”. Viene de la lengua  griega. 

Hay que estar en comunión, no ilusoria, sino en comunión límpida, que estimula a actuar en lo concreto de las situaciones. Esta comunión induce ante todo a comprender, a amar. 

Antonio. Fue un  confesor del siglo XV.  Hay muchos patronos de los médicos y enfermeros. Este es uno de ellos.

Le tocó vivir una época difícil para la profesión de médico. Había nacido en Milán en los primeros años del  1400.

Hizo sus estudios académicos y se doctoró en medicina quirúrgica.

Entre los demás médicos de su época, él se distinguía por su doctrina, que, aunque teológicamente perfecta, suscitaba algunas sospechas en el campo de la medicina.

Sostenía que el pecado es la causa de todas las enfermedades. El pecado original produjo el mal general, y el pecado actual produce las enfermedades  hodiernas.

El comenzaba sus intervenciones  y curaciones con una confesión, con el fin de someter al  paciente a un estado de gracia, calma y serenidad.

Entró en el convento de san Agustín para curar mejor a los pobres.

Pasó de Milán a Perugia y Aquila. Atendía a mucha gente, y les llevaba  la Eucaristía en tiempos de peste.

Tuvo sus enemigos entre los propios médicos. Sufrió algunos atentados. Murió a los 70 años en el año 1484. 

¡Felicidades a quien lleve este nombre! 

“Existen muchas mujeres adorable, pero ninguna perfecta” (V. Hugo).