Momentos de paz

Así te quiero, fluida y sucesiva...

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB



“Así te quiero, fluida y sucesiva,/ manantial tú de ti, agua furtiva,/ música para el tacto perezosa. Así te quiero, en límites pequeños,/ aquí y allá, fragmentos, lirio, rosa,/ y tu unidad después, luz de mis sueños” (Gerardo Diego).

Has amanecido a este nuevo día. ¡Enhorabuena! ¡Alégrate! ¿Qué bien te veo!

Vente conmigo un rato. Nos sentaremos en un rincón para meditar este momento de paz. ¿Te parece bien?

Estoy a tu lado y estoy perdido en ti, prisionero dichoso ante tus puras caricias.
Así, en la refulgencia de mi alma, no tengo otras palabras más bellas que decirte: te quiero fluida, sucesiva. No monótona, posesiva, problematizada.

Quiero ver en ti el manantial que hay en tu corazón y que, raras veces, le das salida por tu timidez.

Quiero verte como la rosa que hay junto a nuestro banco en el jardín. ¿Tiene miedo la rosa de mostrar su hermosura¿

No. Mírala qué sencilla aparece ante nuestros ojos. Es un encanto.

Tú eres el lirio blanco de mi vida. Sí, de verdad. Hoy estás a mi lado y me siento completamente feliz. El lirio, decía el Señor, crece feliz en el campo. Pero ellos no son nada en comparación con tu belleza.

Belleza, la tuya, hecha de sueños en este día para este corazón que, sensiblemente, contacta contigo en el dial de la ilusión.

Tú eres música que aquieta mi espíritu. El rincón del jardín se ha quedado contento al verte a ti y a mí. 
Pasa hoy un día envuelta en tu manantial.

¡Vive hoy feliz!