Ante el Sagrario y la Palabra de Dios

Hijo, si te llegas servir al Señor...

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

Hijo, si te llegas a servir al Señor,

prepara tu alma para la prueba” (Eclesiástico 2.1) 

 

 

Señor,

hay quien cree

que seguirte por la senda del Evangelio

es cosa fácil.

Lo que más me gusta de ti

es que eres exigente.

 

La exigencia me impulsa

a huir de toda rutina y mediocridad;

tu exigencia me mueve a ser

una persona comprometida

y no una piltrafa “cumplidora”.

 

Sé de sobra que quien te sigue

está preparado para la prueba.

Tu camino no es un sendero de rosas,

sino una senda por la que encontramos

dificultades para ser mejores.

 

No soy ningún “beato o santurrón”.

Me parto la vida por tu Evangelio

que me compromete a una acción

por los más débiles y desamparados.

 

Cuanto más de cerca uno te sirve,

más satisfacción encuentra en lo que hace.

Tú me das una fuerza divina sin medida

para trabajar sin cansarme.

 

Es lo que decía tu santo:

“El alma que anda en amor ni cansa ni se cansa”.

 

¿Cómo me voy a cansar en tu obra apostólica?

 

Es sencillamente, Señor,

de cuanto  hago, la más bella y hermosa.