San Braulio Marzo 26

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

Etimológicamente significa "espada de fuego".

Estamos ante un gran santo español, nacido en Zaragoza cuando su hermano era obispo. Dadas sus cualidades y sus dotes de santidad fue el mismo pueblo quien lo eligió para que sustituyera a su hermano. Tuvo como maestro al gran Isidoro de Sevilla, una de las lumbreras más grandes de la vida religiosa española. Y sin embargo, le enviaba sus escritos para que se los corrigiera. Tanta era la confianza del maestro en su discípulo.

Era una persona que, debido a su brillante inteligencia, participó en tres concilios de Toledo, en los que tomó parte activa. Los asistentes a esta magna reunión de obispos, lo consideraban como el oráculo de la Iglesia española.

El mismo Papa Honorio, al recibir una carta de Braulio, se hizo eco en toda Roma de la claridad de su escrito. Otra carta se la escribió al rey Chinsavito. En ella le hacía la profecía de que su sucesor sería Recesvinto.

¿Cuáles son las constantes de la vida de Braulio?

  • La primera preocupación de su celo pastoral consistió en la educación del pueblo. Había herejías que envenenaban a la gente sencilla con errores graves, sobre todo el arrianismo, doctrina que negaba que Jesús fuera Hijo de Dios verdadero.
  • Hablaba y escribía con tal convicción que el mismo pueblo comentaba:<<Parece que cuando habla, es el mismo Espíritu Santo el que le va diciendo lo que él tiene que decir>>.
  • No descuidaba su vida interior. Por eso era frecuente verlo horas y horas en el santuario de la Virgen del Pilar haciendo oración. De este encuentro con Dios sacaba fuerzas para vivir entregado a los pobres y dándoles el ejemplo con su propia vida. Nada arrastra más que el propio testimonio de las obras.

Todo lo focalizaba bajo la atenta mirada de Dios. Por eso, su existencia transcurría instruyendo a los ignorantes, viviendo los pesares de la clase trabajadora. Terminaba sus cartas y sus sermones diciendo:<<Braulio, siervo inútil de los santos de Dios>>.

Llegado a la ancianidad, perdió la vista, verdadero sacrificio para una persona como él entregada al estudio simultaneado con el trabajo.

Llegado el momento de su muerte, dijo ante la voz que le hablaba desde lo alto:<< Voy pronto, Señor, ya estoy listo>>.

Murió santamente como había vivido en el año 651.

¡Felicidades a los Braulios!

"Cada libro en llamas ilumina el mundo" (Emerson)