San Andrés Avelino, Noviembre 10

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

Etimológicamente significa "fuerte, viril". Viene de la lengua hebra.

El Señor dijo: "Pueblo mío, no te olvidaré. He disipado como niebla tus rebeliones; como nube tus pecados: vuelve a mí, que soy tu redentor".

Fue un sacerdote nacido en Castronono, cerca de Nápoles, en 1521, y murió en esta ciudad en 1608.

De joven hizo sus estudios en la universidad de Venecia.

Su devoción a la Virgen la aprendió en casa de labios de sus padres. Fue la Señora la que le ayudó a superar muchas dificultades.

Como era inteligente, acabó su doctorado en Derecho.

Cuentan que en un juicio se le escapó una mentira. Lo sintió tanto que por este motivo abandonó la jurisprudencia.

Lo ordenaron de sacerdote en la congregación de los Clérigos Regulares de san Cayetano (Teatinos).

Pronto se dio cuenta de lo que había que hacer. Una tarea difícil tenía ante sus ojos: la reforma de los conventos.

Era un misionero infatigable.

San Carlos Borromeo lo invitó a Milán para que predicara misiones y al mismo tiempo para que fundara una casa de Teatinos en la ciudad.

Poseía muchas cualidades, entre las que destaca una muy especial: era un excelente director de almas.

Desempeñó el cargo de superior en varios conventos.

Entre sus amigos hay que poner de relieve a Lorenzo Scuoli, autor del libro famoso "Combate Espiritual".

Lo llevó a los altares el Papa Clemente XI.

¡Felicidades a quien lleve este nombre!

"Si estás libre de enemigos porque a nadie hiciste injurias, no te faltarán otros que lo sean por envidia" (Séneca).