Postal a los jóvenes

El proyecto del Reino de Jesús

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB 

 

 

El Proyecto del Reino que anuncia Jesús es tan nuevo y tan humano, que no cabe en la mente de los que le rodean, incluso en sus familiares. Su modo de proceder les pare una locura. Los pobres, los enfermos, los marginados se agolpan junto a Jesús, que siempre les llena de vida y esperanza.
Si crees en Jesús tu vida se parecerá a la suya, tu corazón se llenará de nombres y quizá te encuentres con muchas incomprensiones.

Mc 3,20-21: “Decían que estaba fuera de sí”

Este breve pasaje es muy duro para la familia de Jesús, hasta el punto que varios exegetas han intentado ver en “los suyos” (v.21) no a los padres, sino a los discípulos de Jesús, y otros incluso han llegado a poner en boca de los discípulos el epíteto “ha perdido la cabeza” refiriéndose a la multitud y no a Jesús. Realmente parece que fue la familia de Jesús la que intervino y la que fue responsable del epíteto aludiendo a Jesús.

A Marcos le gusta presentar a Jesús en un contexto de crisis, y así se explica esta anécdota referente a la familia del Maestro en que apunta a una enseñanza posterior. Jesús está en el centro de una serie de antagonismos e incredulidades. La única posibilidad de adhesión a él debe pasar por encima de la dependencia carnal y apoyarse en una dependencia espiritual forjada en la fe.

El discípulo es casi siempre un aislado. Su madre, su hermana… tienden a limitar sus medios de expresión y a atraerle hacia la casa concreta y segura. Sin embargo el discípulo está llamado a romper con todas las estructuras que le impidan dedicarse a su misión, así provengan éstas de círculos tan cercanos como la familia, y abrirse a un nuevo mundo de relaciones basadas en la fe y en la convicción de ser elegido por Jesús.