Postal a los jóvenes

El sábado es para el hombre

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB 

 

 

Los discípulos de Jesús están estrenando la libertad. Jesús comparte con ellos su señorío. La libertad es don y tarea diaria. No a todos les gusta ese nuevo aire del Espíritu. Quieren igualar a todos desde fuera, desde las normas. Jesús pretende hacerlo desde el corazón, para eso comunica el regalo del Espíritu.
Si te sientas junto a Jesús para que él te enseñe a vivir, te quita los miedos del corazón para que salgan de ti palabras limpias y gestos de bondad. Jesús pinta en tu rostro la esperanza.

Mc 2,23-28: El sábado se hizo para el hombre, y no al revés

En Marcos se presenta muy bien la libertad con que actuaban Jesús y sus discípulos. No estaban tan apegados a las leyes, entre ellas la del sábado, que prohibía el arrancar espigas en dicho día. Pero esto no violaba la ley de Dios, sino las leyes meticulosas de los ancianos. Pero Jesús da una respuesta certera con una pregunta: ¿No han leído lo que hizo David cuando él y sus compañeros pasaban necesidad y estaban hambrientos?

Obviamente sí habían leído lo que ocurrió en ese pasaje del Antiguo Testamento, pero no les interesaba en absoluto. Si David, al comer de los panes consagrados junto con sus compañeros, no recibió la reprobación de Dios, es decir, fue inocente frente a aquellas leyes, mucho menos los discípulos de Jesús serán condenados por los escrúpulos de unos pocos. Jesús tiene bien claro que ni el sábado ni cualquier ley deben estar por encima del ser humano.

Cuando esto ocurre surgen la injusticia, la opresión, la desigualdad, que impiden al ser humano vivir como tal. Las leyes deben estar al servicio de la persona, y no por encima de ella. Deben ser para el bien de todos, y no para oprimir y esclavizar.
Lo que tenemos que tomar en cuenta en nuestras vidas no es tanto qué está mal hacer en el Día del Señor, sino, más bien, ¿cómo puedo emplear mejor este día para gloria del Señor y el bien de la humanidad? Trabajemos para que las leyes y normas estén siempre al servicio de las personas, y no en contra de ellas. Esto es humanidad.