Postal a los jóvenes

Alimento de vida eterna 

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB 

 

 

Jn 6,22-29: “Trabajen por un alimento que da vida eterna”

Jesús y sus discípulos se trasladan durante la noche, de los alrededores de Tiberíades a la ciudad de Cafarnaún. Al amanecer, la gente que había participado de la multiplicación de los panes, al no encontrarlos, se va a buscarlos.

Jesús les cuestiona entonces el interés que tenían en buscarlo: estaban más preocupados por comer que por la enseñanza del reino. Y les enfatiza: "la única obra que Dios quiere es que crean en aquél que él ha enviado". ¿Qué significaba para un judío creer en Jesús, más aun, creer que él era enviado de Dios?

Creer en Dios Padre y su enviado significaba no esperarlo todo de él en forma pasiva, sino comprometerse en unión con otros a cambiar la propia situación haciendo experiencias de fraternidad.

Hoy, muchas instituciones religiosas y sociales han hecho con gran facilidad del asistencialismo su bandera, dejando esa práctica huérfana de toda intención mayor. La Palabra de Dios nos exige revisar si nuestras prácticas pastorales están dedicadas sólo a resolver necesidades inmediatas, sin generar procesos organizativos y conciencia crítica ante las causas de la injusticia.

La misión de los cristianos está llamada a generar un equilibrio entre asistencia y formación; entre ayuda solidaria y acción por la justicia. Sólo así ayudaremos al pueblo a dignificarse y salir de las dependencias a las que ayer y hoy ha estado sometido.