Postal a los jóvenes

Saber rezar cuando todo va mal

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB 

 

 

He aquí a dos hombres que no están exentos de la reunión de oración aquella tarde. Su jornada había sido catastrófica hablando humanamente, calamitosa y agotadora. En efecto, han debido sufrir la incomprensión de la multitud, malos golpes, la injusticia de la cárcel en condiciones espantosas, etc. Necesitaban una ayuda psicológica por parte de los cristianos. Pero nada de eso.

¿Qué haces cuando todo te va mal? ¿Por qué no redescubrir el secreto de esos dos?

"Hacia media noche, Pablo y Silas rezaban y cantaban alabanzas al Señor" (Hechos de los Apóstoles 16,25).

Saben que con sus solas fuerzas no pueden nada, ya que detrás de ellos está el Diablo que detesta a la gente que reza. Siguen orando y van a comprender por qué les pasa lo que les ocurre. Es la oración, comprended la comunión con Dios que da la alegría al corazón. Por eso, además de rezar, cantan porque hacen doblemente oración.

Rezan porque saben que nada negativo es definitivo para quienes rezan a Dios. ¿Lo sabes tú? Doquiera hay gente que ora, todo puede suceder y es lo mejor.

Rezan, ¿y qué piden? Se ignora, porque en el fondo, porque eso no tiene tanta importancia; lo que cuenta es que esa gente se siente afectada moral, física y psicológicamente. ¿Y espiritualmente? No mucho. Y justamente lo que necesitan es la comunión con el Señor. De lo demás se encarga Jesús.

Una actitud de fe para hoy

Señor, perdón por todas las veces en las que me he desalentado por circunstancias contrarias. Quiero aprender de ti y de tu palabra. Soy consciente que necesito de ti, de tu presencia más que de ninguna otra en el mundo. Gracias por ayudarme. En el nombre de Jesús, amén.