Postal a los jóvenes

Vivir para dar

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

“Acordémonos de lo que el Señor Jesús dijo:” Es mejor dar que recibir” (Hechos de los Apóstoles 20,35).

Observa a tu derredor. La mayoría de la gente piensa que es feliz cuando obtiene lo que quiere. No creo que estés de acuerdo, porque la verdad está justo en lo contrario.

Cuanto más vives para ti mismo, tanto más desgraciado te haces. Sin embargo eres la persona más feliz cuando das a los otros. Es posible vivir así todos los días. Sumergido/a en el océano de Dios, te das cuenta de que “dar” no es simplemente algo material, sino la riqueza de tu interior a la persona que tenga la onda para aceptarlo sin traicionarte. Hay que dar con los criterios de Dios, no por corazonadas que te pueden pasar factura.

Puede ser algo simple, pero el impacto en la vida de los otros puede ser enorme. Da una palabra de aliento a un miembro de tu familia o a un amigo. Compra provisiones a una familia que sabes que pasa necesidad. Visita a alguien en el hospital. Date a ti mismo: tu tiempo, tu energía, tu talento y ve lo que Dios va a hacer.

El enemigo quiere hacerte creer que a menos que seas perfecto, no estás cualificado para ayudar a los demás. Es totalmente falso. Toma la decisión de ser alguien que da y busca el medio de bendecir a los otros. 

Si lo que haces, no lleva el sello de la alabanza y de la glorificación de Dios, es simplemente filantropía, algo que se hace pero sin el amor de Dios.

Estúdiate bien: Da lo mejor de ti mismo pero pon siempre en el frontis de tu vida: Lo hago por Dios.

Oración para hoy: Señor, me has dado el valor y el talento de ser una persona que anima y entusiasma a los demás. Quiero hacer de mis palabras y acciones instrumentos de estímulo para los que padecen necesidad. Gracias por darme cuanto soy más que lo que tengo. En el nombre de Jesús. Amén.