Postal a los jóvenes

Cuida tus amistades

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

“Quien frecuenta a los sabios será sabio, pero el que frecuenta a los insensatos va derecho a la desgracia” (Proverbios 13,20)

¿Has observado que en compañía de ciertas personas, te sientes más fuerte, más animado y con ganas de ser mejor? Y al contrario, con otras te sientes más débil y presa fácil de duda y miedo.

La verdad es que cada persona que frecuentas afecta a tu vida. Su influencia impacta todos los aspectos de tu existencia: tu alegría, fe, entusiasmo, miedo, celo, consagración, integridad, visión, esperanza, actitud, etc.

Las personas que tienen dominio de sí mismas cuidan con extrema delicadeza sus compañías. Saben que su ambiente determina sus realizaciones. ¿No se dice; “Dime quién frecuentas, y de diré quién eres?

Algunas relaciones son dañinas para tu personalidad. Algunos de tu “amigos” te miran sólo por tu pasado. Nunca te alientan de cara a tu vida actual y futura. Sienten envidia si vas bien. ¡¡Y hay gente así!! ¿Y los frecuentas?...

Poco antes de su crucifixión, Jesús trató a su amigo Pedro como enemigo, diciéndole: “Apártate de mí Satanás”. Porque en aquel momento, Pedro no se preocupaba del futuro de Jesús, ni de su fin, que era el cumplimiento de su destino (la crucifixión) para salvar al mundo.

Lo mismo cuando Jesús llamó a Judas “mi amigo” al entregarlo. Porque en aquel momento preciso, Judas era el instrumento que impulsaba a Jesús hacia la voluntad de Dios en su vida.

Date cuenta que la elección de tus amistades o compañías determina el nivel de tu ser en la vida. La cantidad y la calidad del fruto que llevas, se ven influenciadas por el ambiente en el que te desenvuelves. ¡Atención! Si no sabes discernir tus verdaderos amigos, corres el riesgo de frecuentar gente indeseable; gente que pone un freno a tu madurez y a la realización de tu proyecto personal.

Oración para hoy: Señor, concédeme que sepa reconocer a las personas que envías a mi vida. Líbrame de toda forma de compromiso y ligereza en la elección de mis amistades. En el nombre de Jesús, amén.