Postal a los jóvenes

“Estad en vela, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor” (Mt 24,42)

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB 

 

 

“Estad en vela, porque no sabéis qué día vendrá vuestro Señor” (Mt 24,42)

La obra maestra la realiza Dios, pero a la persona le toca disponerse para ello. La oración es una espera del Señor con la puerta abierta y la candela encendida. Haz un poco de gimnasia todos los días: unos minutos de oración para poner tu corazón en sintonía con Dios, unos minutos para escuchar a Dios y a los hermanos, unos minutos para atender a los más pobres.


Hoy, como cristianos, hemos de llegar a reconocer a Jesús como la fuente de la que emerge nuestra vocación y servicio a la comunidad. Jesús viene constantemente a nuestra vida de una manera muy concreta, en aquellos más necesitados de su misericordia; y no sólo en los pobres, marginados, excluidos y enfermos, sino también en aquellos que buscan una palabra de comprensión, de ánimo, de esperanza, ser escuchados, valorados y respetados. No creamos que esperar a Jesús es simplemente asumir una actitud de santidad para consigo mismo, encerrándose y aislándose del mundo real, que nos necesita para ser un espacio mejor de convivencia. Jesús llega a nosotros constantemente en diversidad de realidades, y hemos de estar preparados desde la oración, desde una actitud de conversos siempre abierta al cambio, desde la justicia y la misericordia, para reconocerle vivo y presente. “Estén vigilantes” es estar buscando constantemente la construcción del reino de Dios, en nuestra familia, nuestra comunidad, nuestro trabajo y otras tantas realidades que hacen parte de nuestro universo cotidiano. Dios llega en lo sencillo, por medio de lo que a veces no cuenta; en lo pequeño se muestra grande, en lo sencillo se revela increíble.

ORACIÓN:

Aquí estoy, Señor.
Aguardo tu venida.
Con el oído atento para oír tu voz.
Con el corazón preparado para el encuentro