Postal a los jóvenes

¿Al César? ¿A Dios? Difícil...

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB 

 

 

“Lo que es del César pagádselo al César, y lo que es de Dios a Dios” (Mc 12, 17)

Jesús acepta el debate en el terreno movedizo de sus interlocutores; pero sus palabras revelan la primacía de Dios en todas las áreas de la vida. Lo de Dios siempre tiene que ver con lo que les sucede a los que peor lo pasan en este mundo: los pobres, los explotados, los excluidos, las víctimas de la injusticia.

Mc 12,13-17: Den al césar lo que es del césar

La primera lectura nos invita a esperar la venida del Señor en nuestra vida personal y comunitaria. Es una dinámica que nos mantiene activos y vigilantes en la fe y la conversión, atentos a dar una respuesta desde Jesucristo a cada una de las situaciones que se nos presenten diariamente.
En el evangelio, los herodianos, un grupo político que estaba a favor de

PONER A PRUEBA A JESÚS:

Herodes y los fariseos, se acercan a Jesús para probarlo con una pregunta y dejarlo en una situación bastante peligrosa por la respuesta que fuera a emitir, y posteriormente acusarle y condenarle. Jesús no es tonto, y su respuesta lleva a que tanto los herodianos y fariseos como sus discípulos entiendan que las obligaciones que adquiere el ser humano con las leyes civiles han de ser cumplidas y no pasadas por alto en función de una opción de vida religiosa, como es el ser cristiano.

DIOS TIENE SU PUESTO

Dios tiene su puesto, y el creyente ha de saber respetarlo. El ser humano, por tanto, no debe colocar en tensión aquellas cuestiones que se refieren al fuero civil con las del fuero religioso, pues ambas, relacionadas y en equilibrio, pueden llevar a que se consiga una mejor sociedad, justa y participativa para sus integrantes.

ORACIÓN:

 

Cuando voy a tu encuentro, Señor,
Tú me señalas a los demás.
Cuando miro a los pequeños,
ellos me señalan tu corazón.