Postal a los jóvenes

¿Soldado o agente secreto?

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB 

 

 

"No es soldado quien se aparta de los asuntos de la vida, si quiere agradar al que lo ha enrolado" 2 Timoteo 2,4

Un día, un hombre salía de la iglesia. Esperaba estrechar la mano del sacerdote. Este, viendo al hombre, lo cogió por la mano y lo apartó a un lado. "Necesitas comprometerte en el ejército del Señor, le dice el sacerdote.

"Le pertenezco ya", respondió.

"Ah bien! ¿Por qué no te veo, salvo en Navidad y Pascua?"

El hombre murmuró de manera confidencial: "Soy un agente secreto."

La Iglesia del Señor no necesita agentes secretos, sino verdaderos soldados. Me acuerdo de una persona nueva que cambió con motivo de una reunión de oración sobre Evangelio. Tras la reunión, vio a un colega de trabajo en la sala y se dio cuenta de que era cristiano desde hacía muchos años. Entonces, lo más natural del mundo, le dijo: "¿Pero por qué no me has hablado nunca de Jesús?" Quizá era un agente secreto..

Un soldado auténtico se reconoce pues busca siempre agradar al que lo ha enrolado. Con prudencia y dulzura, archiva el colora Una de las diferencias entre un agente secreto y un soldado, es que éste último se reconoce en una multitud por su uniforme mientras que el espía se parece a todo el mundo pues su objetivo es pasar desapercibido

Pablo anima a Timoteo a ser un soldado para el Rey de los reyes. En la primera carta le dice: "Combate el buen combate de la fe, llevado por la vida eternal a la que has sido llamado y por la que has hecho una Buena confesión". (1 Timoteo 6,12). Hagamos de estas palabras, un consejo para nuestras vidas.

Una oración para hoy

Señor, te pido que me des la fuerza y el valor de ser un soldado a la altura de su jefe. Que pueda darme cuenta que eres el Dios de los Ejércitos. Amen.