Postal a los jóvenes

Dios se ocupa de ti

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

"Echando la red, cogieron gran cantidad de peces, y la red se rompía. Hicieron señas a sus compañeros para que les ayudaran. Vinieron llenaron las dos barcas hasta el punto que se hundía. Cuando vio eso, Pedro cayó de rodillas ante Jesús y dijo: Señor, apártate de mí, que soy un pecador" Luc 5,6-8.

La obediencia a Jesús tiene por consecuencia un milagro. A pesar de la noche pasada pescando sin coger nada, a la orden de Jesús, en el mismo lago, la pesca es milagrosa.

Cuando Jesús se convierte en el dueño de nuestra barca, lo que parecía infructuoso se hace fructuoso. Es el mismo lago, la misma barca, los mismos pescadores, la misma red y sin embargo todo cambia. ¿Cuál es el elemento más o menos que ha provocado eso? La obediencia a la Palabra del Maestro.

Simón debió ser interpelado por el hecho de que Jesús se cuidara de las necesidades de los jornaleros. La reputación de Jesús se establecía en el hecho de que curaba a los enfermos, libraba a los cautivos. Pero esta pasaje es el primero en el Evangelio de Lucas en donde se encuentra una intervención de Jesús en el aspecto profesional y material. El Señor n quiere únicamente perdonarte, librarte y curarte sino que desea responder a tus necesidades cada día.

Imagina conmigo la escena en el instante en que las barcas vuelve de la pesca, llenas hasta el borde. La multitud debió exclamar estupefacta. ¿Puedes oír los clamores de estos hombres y mujeres?

Me quedo siempre maravillado cuando oigo testimonios de lo que Dios hace en la vida de modo diario.

Jesús no es únicamente el Dios de la Salvación sino también el Dios de lo cotidiano. Aprende a rezar como te ha enseñado en su palabra: "Danos hoy el pan nuestro de cada día" (Mateo 6,11).

Una oración para hoy

Señor, vengo ante ti a rogarte que te ocupes de mis necesidades diarias. Como me has enseñado, oro: "Danos hoy nuestro pan de cada día”. En el nombre de Jesús, amén.