Postal a los jóvenes

Distracciones

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

“Velad con cuidado de vuestra conducta, no como locos, sino como prudentes; rescatad tiempo, pues los días pasan pronto." (Efesios 5.15-16)

El mundo nunca ha ofrecido tantas distracciones como hoy. Y una de las distracciones más seductoras y más desarrollada, es el estímulo de gestión deportiva. Para algunos, es una diversión justa e inofensiva. Para otros,
eso puede crear obsesión e incluso adicción.

Por ejemplo, la revista Advertising Age relataba recientemente que en el 2006, alrededor de 15 millones de personas gastaron más de mil millones y medio de dólares en este género de juegos, sólo en Estados Unidos.
Un estudio realizado por unauniversidad de Mississipi ha demostrado que el jugador medio pasa 3,8 horas por semana y con un gasto de 265 dólares al año.

Dios no está en contra de la diversión o los pasatiempos pero no pide que no malgastemos nuestro tiempo. La manera con que empleemos el tiempo es lo que nos importa.
Pablo nos dice que si no prestamos atención, podemos ser imprudentes, hasta locos. Pero Dios Quiere que seamos prudentes, sabios y que aprovechemos el máximo de nuestro tiempo. Cada día nos colocamos ante elecciones, y debemos darnos cuenta de que los días son malos.
Es muy fácil coger malos hábitos, malgastar el tiempo y el dinero en cosas que no son buenas para nosotros. Si no somos prudentes, estas ocupaciones pueden dominar nuestra vida e incluso hacernos esclavos o drogadictos.
Debemos tomar nuestras responsabilidades en lo referente a nuestras actividades.

Hoy, toma en consideración lo que haces con tu tiempo y los recursos que Dios te ha dado. No permitas que nade de este mundo te domine y te haga esclavo de algunos malos hábitos o placeres, aunque te parezcan inofensivos.
Si experimentas dificultades en gestionar tus prioridades, pídele a Dios que te ayude y saques provecho saludable a tu tiempo. Lee su palabra y busca ante todo su y su justicia.

UNA ORACIÓN PARA HOY

Padre, muéstrame si malgasto mi tiempo en actividades profanas. Quiero hacer que mi tiempo fructifique y consagrarle todos los tesoros y talentos que me has dado. En nombre de Jesús, amén.