Postal a los jóvenes

El trabajo y el descanso

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

““Trabajarás. Pero...descansa"( Éxodo 23,12)

Lunes 24 de febrero del 2003, el mundo de la gastronomía francesa-Paul Bocuse a la cabeza- lloraba una desaparición que dejaba en gran vacío: los medios de comunicación anunciaban el suicidio del gran chef Bernard Loiseau. Sesegún el medio, el cocinero afamado trabajaba en los hornos sin descanso, siete días sobre siete. Cuando dejó su célebre mesa burguiñona de Salieu, estaba para irse a París a uno de sus otros restaurantes, que gozaba también de mucha notoriedad. Piensa: 3 estrellas y 19 de 20 en el "Gault yMillau" – perdona un poco- eso marcha.

Ciertamente, el esfuerzo es saludable. La Biblia predica el valor del trabajo, "precioso tesoro del hombre (Proverbios
12,27), que se pone en guardia muchas veces contra la pereza: "Si alguien no quiere trabajar, que no coma" (2Tesalonicenses 3,10)...
Sin embargo, la actividad más legítima-incluso el servicio para la casa de Dios- puede cegarte, transformarse en un ídolo impío. Considera las palabras del sabio: "Más vale una mano llena con descanso que dos manos llenas con traba y a la persecución del viento" (Eclesiastés 4,6). Y vive el cuarto mandamiento: "Acuérdate del día de descanso... para ponerlo aparte" (Éxodo 20,8-11).

Cuando descubres la gracia-perdón inmerecido que Dios te ofrece- eres libre de tus pecados y la paz de Dios te invade. Entras entonces en el "descanso de sábado" (Hebreos 4,9) y, en tu marcha cristiana, aprenderás a permanecer en él.

Tu ser entero conoce la realidad de un descanso físico, moral y espiritual que te hace decir como a David: En el corazón me has infundido más alegría que ciando abundan su grano y su mosto. En paz me cuesto y al punto me duermo, porque tú solo, Señor, me haces vivir tranquilo" (Salmo 4,8-9).

UNA ORACIÓN PARA HOY:
Señor, no quiero ser perezoso, sino poder alegrarme del fruto de mi trabajo.
Y te pido también que conserves toda mi actividad pero que no me lleve a abandonar mi descanso espiritual y se mantenga en paz mi corazón. Amén.