Postal a los jóvenes

Dios quiere cambiar tu nombre

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

“Tú eres Simón, hijo de Jonás: tú serás Pedro”(Juan 1,42).

Cuando aceptas ser hijo de Dios, tu vida y tu carácter cambian. Por supuesto, a condición que dejes que Dios se manifieste en ti y crucificar espiritualmente tu vieja naturaleza.

En la época bíblica, cuando nacía un niño, a menudo los padres no le ponían el nombre de inmediato, salvo la circunstancia particular que rodeara al nacimiento. En un primer momento el niño llevaba el nombre de su padre. Así, si se llamaba José, el niño tomaba el nombre de “Bar José”, lo que significa: “el hijo de José”. Al crecer, el carácter del niño se revelaba y
era entonces solamente cuando se le daba un nombre que era el reflejo de su personalidad.

Una de las cosas extraordinarias y maravillosas que encuentras en la Biblia es ver que Dios cambia los nombres por encima de las palabras, cambia el carácter.

He aquí algunos ejemplos:

- Simón, el hombre de “dientes de sierra” se convierte en Pedro, en una “columna de la iglesia primitiva.
- Saúl de Tarso, el perseguidor de la iglesia, se convierte en “ el apóstol Pablo, un fundador de iglesia.
- Jacob, el engañoso, llega a ser en Israel el padre de las doce tribus...

Dios tiene la capacidad de ver tu porvenir más que tu pasado. Un encuentro personal con Dios cambia tu vida para siempre.

UNA ORACIÓN PARA HOY: Señor, conoces mi vida y sabes cuáles son mis faltas. Necesito que cambies mi carácter. Cambia mi nombre. Me llaman el “colérico. Haz que sea “dulce” Me llaman “impuro”. Haz que sea “puro” en el nombre de Jesús. Amén.