Meditación diaria Biblica P. Felipe Santos Campaña SDB

La amistad con Jesucristo, secreto para una vida feliz

“Para vivir una vida plena, feliz y fecunda, el secreto está en la amistad con Jesucristo”. Así lo ha manifestado el Rector Mayor de los Salesianos, don Pascual Chávez, en el mensaje que dirigió a los jóvenes del Movimiento Juvenil Salesiano el pasado 31 de enero, coincidiendo con la fiesta de San Juan Bosco.

En ese mensaje, el Rector Mayor habla a los jóvenes del Dios apasionado por la vida. “La vida es el don más precioso que habéis recibido: respetad, defended, amada y servid la vida, toda vida y la vida de todos”, dice ante las situaciones que encuentran muchos jóvenes de muerte (terrorismo, abuso, explotación, desprecio por la vida humana...). Precisamente en los jóvenes “debe nacer una nueva energía, un movimiento que comunique la pasión de Dios por la vida del hombre”.
Y esto será posible, explica Pascual Chávez, si se vive una estrecha relación con Cristo, que “entró en el corazón de la realidad humana, única y maravillosa; gastó toda su vida liberando, salvando y dando vida a los oprimidos por cualquier clase de mal; conoció la alegría, la amistad, pero también el dolor, la persecución y la muerte. Dando la propia vida por amor y resucitando de la muerte, inició una vida plena y para siempre”.

El cristiano, que vive de la resurrección, sabe que “en el interior del universo arde ya el fuego de Dios”. Para descubrir esta realidad, Pascual Chávez invita a los jóvenes a levantar “los ojos de la distracción cotidiana que os lleva a un vacío existencial, comenzad a dar vida a la parte más profunda y más íntima de vosotros mismos, dedicad tiempo a la oración que os revelará la profundidad del corazón de Dios y de vuestro mismo corazón de hombres y mujeres. De lo más profundo de vuestra alma sacaréis un nuevo sentido de las cosas, una visión más amplia de la historia, la fraternidad que nace del corazón del Cristo Resucitado y que se manifiesta en la Iglesia. Ella es el “sacramento” de la misericordia de Dios en este mundo. Es la casa del Dios accesible,

Hijo de un soñador, como lo era San Juan Bosco, el superior de los salesianos también tiene un sueño. “Mi sueño –explica-, es ver que los jóvenes encuentran a Cristo y en él encuentran el sentido y el gozo de la vida, la respuesta a sus expectativas e ideales, su lugar en la Iglesia y en el mundo. Mi sueño es veros a vosotros, jóvenes del tercer milenio, como riqueza del presente, desarrollando vuestros talentos y vuestras energías de bien, invirtiendo en el servicio a los demás, para rejuvenecer la sociedad y la Iglesia. Mi sueño es veros misioneros de vuestros amigos, haciendo visible en los acontecimientos de cada día el rostro de Cristo en el que todos se reconozcan”.

Para que este sueño se haga realidad, Pascual Chávez emplaza a toda la Familia Salesiana “a ser siempre, con más claridad y más explícitamente, promotores de la cultura de la vida, contra todo lo que puede amenazarla o disminuirla, portadores del amor de Dios, padres y maestros de espíritu, guías inteligentes y capaces de acompañaros en la búsqueda de proyectos de vida nobles y atrayentes”.