Meditación diaria Bíblica

Rechazar el amor ofrecido

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB 

 

 

"Jesús se encamina hacia su muerte libremente, por amor y quiere que libremente también acojamos su salvación. ¡Bendito el que viene en el nombre del Señor! Escoge vivir bajo su amor y camina en paz hacia la meta.

Lc 13, 31-35: Hoy y mañana seguiré sanando

El profeta, Jesús mismo, ejecuta la lamentación sobre Jerusalén. Los enviados de Dios en los tiempos pretéritos ofrecieron de parte de Dios la salvación a esta ciudad, pero Jerusalén los mató y los apedreó como blasfemos. La historia del repudio a Dios alcanza ahora su punto culminante. La palabra de Jesús es la última palabra de Dios, el llamamiento a la decisión de los últimos tiempos. Todo el amor de la acción salvadora de Dios en la historia está recogido en la misión y predicación de Jesús.

En todo tiempo se había dejado oír en el Antiguo Testamento la comparación del ave que cuida de sus polluelos y los protege, pero nunca con tanta ternura como en las palabras de Jesús. Dios “halló a su pueblo en tierra desierta, en región inculta, entre aullidos de soledad; lo rodeó y le enseñó, lo guardó como a las niñas de sus ojos. Como el águila que incita a su nidada, revolotea sobre sus polluelos, así él extendió sus alas y los cogió, y los llevó sobre sus plumas (Dt 32,10).

Jesús quería recoger a los hijos de Jerusalén, a todo Israel, ponerlos bajo la protección de Dios, cobijarlos en su amor, conducirlos a la salvación.

ORACIÓN:

 

Cúbreme con tu sombra, Señor,
nada temeré en el camino.
Y bendeciré tu nombre,
ante mis hermanos.