Meditación diaria Bíblica

Compañeros en la Evangelización

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

"Expreso a mi Dios mi gratitud cada vez que pienso en vosotros ; rezo por todos vosotros en toda ocasión, y lo gago con alegría. Sí, doy gracias a Dios, pues desde el primer día hasta ahora, por el apoyo que me habéis dado, habéis contribuido al anuncio de la Buena Nueva."Filipenses 1,3-5

Pablo sabía que la extensión del Evangelio era un trabajo de equipo. Sabía que su ministerio nunca habría sido posible sin la contribución de personas como los cristianos de Filipos. Recuerda los que han sido compañeros . La palabra griega es koinonia, que designa un grupo de personas que trabajan juntos.

Contribuyeron en esta obra con la oración y el apoyo financiero. Pablo escribió que había enviado varias veces “dones de para ayudar las necesidades". Gracias a su generosidad, podía decir que había recibido todos sus dones y eran abundantes. Eso agradaba al Señor porque había aportado " el dulce perfume de una ofrenda aceptada por Dios". Gracias a sus sacrificios en sus dones, Pablo pudo decir: "Mi Dios ayudará a todas vuestras necesidades; lo hará, según su gloriosa riqueza que se manifiesta en Jesucristo” (Filipenses 4,16-20).

Este mismo principio es verdadero hoy. Compartimos este fardo de anunciar el Evangelio. Cuando damos a un ministerio, en cuanto individuos, debemos hacerlo en equipo. Comulgamos juntos en esta llamada de Dios. Así contribuimos a la salvación de las almas y al cambio de vidas.


Hoy, comprende la importancia de tus dones y de tus sacrificios por la causa de Cristo. Cuando te entregas a un ministerio, llegas a ser compañeros. Y cuando te entregas, das frutos y recompensas de estos ministerios. Ten por meta de darte como Dios. Y Dios promete que si te das a su obra, te ayudará en lo demás.

Una oración para hoy

Padre, ayúdame a pensar como compañero en equipo en la obra evangélica y en la formación de los discípulos. Muéstrame cómo dar según los recursos que me has concedido. Ayúdame para extender el Evangelio. En el nombre de Jesús, amén.