Meditación diaria Bíblica

Ventana para la luz de Dios

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

"Os escribo un nuevo mandamiento, lo que es verdadero en él y en vosotros, disipad las tinieblas y aparecerá la luz verdadera." 1 Jn 2,8

El hombre de iglesia y poeta inglés George Herbert murió el 1 de marzo de 1933. Con motivo de su próxima muerte, concentró cada vez más su atención en la idea de que iba a pasar a la eternidad con Dios. Sus últimas palabras fueron: " Estaré libre del pecado y de todas las tentaciones y las ansiedades que le acompañan. Descansaré allí donde mis ojos verán a mi Maestro y Salvador."

Educado bajo la fuerte influencia de su madre, Herbert había llegado a ser un gran erudito. Le enseñó numerosos años en la universidad de Cambridge, donde desarrolló sus talentos de escritura, y escribió cantidad de poemas. Con el tiempo, sus poemas expresaban siempre su fe.

Uno de sus poemas más conocidos se titula "The Windows" (litt. "Las ventanas"), y es considerado como una obra maestra por los especialistas. Herbert buscó en él describir la manera cómo la luz del Evangelio puede brillar a través de vasos de carne. Lo escribió como una oración, rogando: "Señor, ¿cómo puede el hombre predicar tu palabra eterna?" Herbert sabía que ninguno de nosotros es perfecto y que el hombre es “un vaso frágil e imperfecto”. Pero el milagro, s que Dios pueda todavía hacer de cada uno de nosotros "una ventana por su gracia".

Hoy, Dios quiere que seas como una ventana abierta a través de la cual puedas hacer brillar su luz sobre esta generación. Quiere que hagas brillar tu amor, su perdón y su gracia. Y quiere utilizar tus recursos para llegar a tocar las naciones con el Evangelio. Vuelve tu corazón a Dios. Aprovecha las ocasiones que te dé. Y, mientras tengas un soplo de vida, deja que su luz brille en ti.


Una oración para hoy

Padre, quiero ser una ventana que permita que entre tu luz brillante. Perdona mis pecados, y ayúdame a ser un vaso puro. Utiliza mi tiempo, mis talentos y mis recursos para tu gloria. En el nombre de Jesús, amén.