Fábulas cristianas
El ruiseñor y el gavilán

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB   



1) La niña marchaba contenta y cantando como un ruiseñor, esa ave pequeñita que canta mejor que ninguna otra.
Atocha, que así se llamaba la niña, se sentó para descansar un poquito mientras se dirigía a su casa.
El ruiseñor la seguía de árbol en árbol cantándole sus mejores canciones.
Atocha, llena de alegría, le dijo:
¿Me quieres oír a mi?
¡Encantado!¡ Eso es lo que estoy esperando!
¿Y por qué?
Porque cuando estoy en el árbol que está junto a la escuela, te he oído cantar muy bien.
¡Anda, niña bonita, cántame!
Atocha, al verlo tan bonito y con plumas ten finas y elegantes, comenzó cantar: ¡Viva el ruiseñor, pajarito bonito, creado por el Señor!
El ruiseñor estaba calladito. Cuando terminó su canto, ¿sabéis lo que hizo?
Yo lo sé, "seño", dijo Barry. El ruiseñor la siguió hasta la puerta de su casa. Muy bien, Barry.


2) ¿ Cantas para alegrar la vida de los otros? ( Diálogo)


3) ORACION

Por las niñas y niños que cantan bien: para que nos canten ahora una canción, roguemos al Señor
Por los profes: para que nos enseñen cantos bonitos, roguemos al Señor
Añade tus peticiones
Digamos ahora cantando: Padrenuestro


ENSEÑANZA

Quien tenga buena voz,
que cante a nuestro Señor