El Pan de tu Palabra
Mt 12, 1.8. El Hijo del hombre es señor del sábado

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

EUn sábado de aquellos, Jesús atravesaba un sembrado; los discípulos, que tenían hambre, empezaron a arrancar espigas y a comérselas. Los fariseos, al verlo, le dijeron: «Mira, tus discípulos están haciendo una cosa que no está permitida en sábado». Les replicó: «¿No habéis leído lo que hizo David, cuando él y sus hombres sintieron hambre? Entró en la casa de Dios y comieron de los panes presentados, cosa que no les estaba permitida ni a él ni a sus compañeros, sino sólo a los sacerdotes. ¿Y no habéis leído en la Ley que los sacerdotes pueden violar el sábado en el templo sin incurrir en culpa? Pues os digo que aquí hay uno que es más que el templo. Si comprendierais lo que significa "quiero misericordia y no sacrificios", no condenaríais a los que no tienen culpa. Porque el Hijo del hombre es señor del sábado».

Ex 11, 10 - 12,14; Sal 115, 12-18 • Mateo 12, 1.8

COMENTARIO


Jesús es un rompe moldes por antonomasia. No le tiene miedo a los fariseos que hacen consistir toda santidad en observar los 613 mandamientos sacados de sus manos para atemorizar a la gente fiel a ellos, los intérpretes de la Ley.


El, con conocimiento de toda Ley y de las necesidades de vivirlas sin ningún prejuicio, ve con toda naturalidad que sus discípulos coman espigas del campo, así como lo hicieron los sacerdotes con el pan sagrado del Templo.


Todas estas novedades fueron las que iban llevando a Jesús a que los fariseos le tomaran odio. ¿Razón? No admiten que alguien extraño venga a romper con lo que ellos han establecido.


No se daban cuanta de que la vida está por encima de todo. ¡Torpes!