El Pan de tu Palabra

Mt 9,14-17

Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB

 

 

El debate sobre el ayuno sigue inmediatamente a la comida escandalosa de Jesús con Mateo y sus amigos, recaudadores de impuestos. Los discípulos de Juan y los fariseos ayunaban para asustar y desprestigiar la venida del Mesías y para prepararse a acogerlo. Los discípulos de Jesús saben que el Mesías ya ha llegado y es Jesús en medio de ellos. Por  eso comen y beben y celebran fiesta.

Jesús se presenta como esposo. El reino de lo cielos se compara con el banquete que el Padre ha preparado para las bodas del Hijo con  la humanidad (Mt 22,1-14). Ayunar durante la comida de bodas no tiene sentido. Jesús anuncia que también sus discípulos ayunarán cuando el esposo se haya ido." Esta expresión, tomada de  Is 53,8, se refiere al Siervo de Yahvé destinado a la muerte violenta y es una alusión a la muerte de Jesús.

El ayuno cristiano tendrá dos significados fundamentales: mirará al pasado en cuanto conmemora la muerte de Jesús, pero será también proyectado al futuro en cuanto que es la promesa de las bodas definitivas del Cordero (Ap 21,9ss).

Con las dos imágenes de la tela y del vino nuevo, Jesús rebate lo inconciliable de su evangelio con las antiguas estructuras religiosas y su contenido. El evangelio no es una  tela nueva sobre un vestido viejo ni un  vino nuevo en barricas viejas.

Los contenedores religiosos precedentes no se rearan, sino que se sustituyen. Por esto todas las tentativas de conciliar la novedad del evangelio con las antiguas estructuras del judaísmo o de cualquier otra religión están destinados al fracaso. Pablo dedica la carta entera a los Gálatas con este tema.

El vino nuevo es símbolo del tiempo de la salvación. El nuevo es el reino de Dios que Jesús anuncia. Propone nuevos contenedores o barricas para la vida cristiana, aquellos mismos que ha proclamado en el discurso de la montaña.