Oración en el huerto

Autor: Eulogio Díaz García

 

De rodillas, en tierra, y abatido,
todo es noche en el Dios abandonado.
¿Dónde está ese Jesús tan admirado,
aquél dulce Maestro discutido?
Es el cuerpo de un hombre, así asumido,
todo un mar que, de sangre, ha transformado,
de salados sudores tan bañado
que es un sol, sin su luz, allí fundido.
Comprender que eres Dios, sin ser quimera,
ni parece que es, de hombre, tu semblante.
¡Ay, Jesús! ¿Cómo ver en tal manera
Tu Divino Poder, en ese instante?
Es la fe y el amor lo que asegura
que eres Dios, y el dolor. es noche oscura.