Rosquillas, turrón y teología de la liberación
Autor: Diego Quiñones Estévez
En la parroquia San Carlos Borromeo,
varios curas-rojos del reptil laicismo,
su ministerio han puesto en descrédito,
pues, no obedecen a la Iglesia de Cristo,
al falsear, el más sacro sacramento,
con materia insólita: turrón y rosquillas,
heréticamente consagrados en nombre
de una teología de historial cainita,
una componenda de los retroprogres
de la liberación neomarxista,
un cubil de teólogos muy relativistas
con multiculturales ateos y actores
y fuerzas vivas mediático-políticas,
que dicen ser la iglesia de los pobres
sin sacramentos ni católica Misa.
Esta herejía de rosquilla y turrón,
que se oficia contra la Eucaristía,
es teología de liberación,
la liberación de liberticidas
que cambian pan de Cristo por migajón.
Supliquemos, pronto, la rica humildad
del que es padre de los pobres de espíritu:
San Carlos Borromeo: el cardenal
que a la Contrarreforma dio su buen ímpetu
y encauzó al clero, en Fe y Verdad.