Admoniciones

Leche y miel

Autor: Camilo Valverde Mudarra 

 

 

A tu posteridad, daré yo esta tierra (Gn 12,7).

El nombre de Palestina se deriva de "filisteos" (pelistin –palestina), habitantes en la zona costera del Mediterráneo. Palestina forma una misma unidad geográfica con el Líbano y la península sinaítica; está en el punto de confluencia de Asia, Africa y Europa; entre el Eufrates y el Nilo, las dos culturas más anti­guas. Es el puente de unión entre Oriente y Occidente, en el terreno comercial y cultural. Fue ele­gida por Dios como escenario geográfico de la historia bíblica. Los cananeos habitaban entonces el país. Bendice a tu pueblo y la tierra que nos has dado, tierra donde corren leche y miel (Dt 26,15). La Tierra Prometida, antes de la entrada de Israel, se llamaba Canaán; los cananeos pertenecían a diversos pueblos orga­nizados en multitud de pequeños reinos, que no formaban una uni­dad política única. De los años 538 al 333 a. de C., Palestina estuvo bajo la dominación persa; del 333 al 63 a. de C., bajo la dominación helénica; en el año 63 a. de C., por obra de Pompeyo, Palestina quedó anexionada a Roma y colocada bajo la dependencia de la autoridad romana residente en Siria. Después de la destrucción de Jerusalén, en el año 70 d. de C., Judea fue constituida provincia romana independiente de Siria y gobernada por legados imperiales de orden senatorial. La rebelión del año 135 d.C., sofocada ferozmente por Roma, puso fin a la nación judía y comenzó su diáspora. En el s. VII, el pueblo judío desapareció totalmente de Palestina.

En 1917, los británicos ocuparon Palestina y la Sociedad de Naciones, en 1922, confió a Gran Bretaña el mandato sobre el territorio y estipuló la creación de un estado nacional judío, dividiendo la región en dos áreas. Luego, en 1947, la O.N.U. determinó el reparto en un estado judío y otro musulmán, que fue rechazado por los árabes. Al año siguiente, el 48, los ingleses se marchan dejando el problema encendido. Ese mismo año, el 14 de mayo, se proclamó el Estado de Israel y, acto seguido, el día 15, la Liga Árabe le declara la guerra. Y, desde ese entonces hasta hoy, la guerra y la discordia se han hecho crónicas. El mismo día, debió de quedar también establecido el estado árabe. Evocando versos de nuestro Jorge Manrique, preguntamos: ¿Qué se hicieron los británicos? ¿Qué fue de judíos y palestinos? ¿Qué se hizo la Organización de Naciones? ¡Qué lástima de ocasión perdida! Se hubieran evitado muchos años de dolor y lucha

Abraham, obediente a su vocación, sale de su tierra y llega a Siquem: A tu posteridad, daré yo esta tierra (Gn 12,7). Es la promesa de la posesión de la tierra de Canaán que Yahvé repetirá siete veces en el Génesis: Te daré a ti y a tu descendencia la tierra en que descansas (Gén 28,13).