Los Reyes Magos, buscaron a Jesús

Autor: Elena Baeza Villena

 

 

Hoy en nuestra sociedad lo tenemos todo muy fácil, todo nos lo sirven a domicilio, sin movernos de nuestras casas podemos comprar, trabajar, hacer envíos…un sin fin de cosas, bien por teléfono, o a través de Internet…Probablemente también queramos que Jesús venga a nuestros hogares sin buscarle. Pero en medio de este ruidoso y agitado mundo, no nos queda espacio para escucharle.
Dios nos espera siempre, está en todas partes, está presente en todos los sagrarios, deseoso de que vayamos a adorarle, pero El, nos ha hecho libres y respeta nuestra decisión. Le buscamos como hicieron los Reyes Magos? Tuvieron muchas dificultades, pero eso no les hizo volverse atrás. La estrella que vieron en Oriente iba delante, hasta pararse donde estaba el niño, una casita pequeña, de una aldea. Tal vez esperarían encontrar un Rey y quedan algo sorprendidos, pero cuando ven a Jesús se alegran. ¡Que grande es la alegría de estos sabios que vienen desde tan lejos para ver a Jesús! ¡Cuánto podemos aprender de los Magos de Oriente! Nosotros tenemos, quizá el peligro de no darnos cuenta de lo cerca que está de nuestras vidas el Señor.
Dios está presente en todos los que nos rodean, en todos los que sufren los zarpazos de la violencia, el abandono, la enfermedad, las injusticias, la pobreza….Si no le encontramos aquí no le encontraremos nunca. Y quién a Dios tiene en su corazón, no mata, no comete actos vandálicos, no roba, no miente, no divide a las familias, no atenta contra la dignidad humana…Porque Dios es amor.