La paz es condición necesaria en la vida social

Autor: Elena Baeza Villena 

 

 

Quién respeta a la persona promueve la paz, para las personas y para las sociedades, la libertad real es quizá la primera condición de la paz. La paz, es fruto de la justicia, entendida en sentido amplio, como el respeto del equilibrio de todas las dimensiones de la persona humana. La paz peligra cuando al hombre no se le reconoce aquello que le es debido en cuanto hombre, cuando no se respeta su dignidad y cuando la convivencia no está orientada hacía el bien común.

Desgraciadamente vivimos en un mundo que pocas referencias morales se hacen sobre la paz. Hoy el Papa ha sido la Voz que en continuidad a la tradición iniciada por Pablo VI, ha hecho una profunda reflexión sobre las relaciones entre la pobreza y la paz, que es síntesis del humanismo integral que propone la Iglesia para dar plenitud a los anhelos del corazón del hombre.

"Combatir la pobreza, construir la paz" es el lema del Mensaje pontificio para esta Jornada Mundial de la Paz.

Dice Benedicto XVI la "inaceptable carrera armamentística" denunciando que "por un lado se celebra la Declaración Universal de los Derechos Humanos del Hombre, y por otro se incrementan los gastos militares, violando la propia Carta de las Naciones Unidas que compromete a reducirlos al mínimo".

Tenemos guerras en curso y otras latentes, que pueden estallar o reavivarse. Por eso es necesario detener la proliferación de armamento.

Para que algún día llegue la paz, habría que exigir que tanto los gobiernos que de manera declarada u oculta poseen armas nucleares como los que quieren procurárselas, inviertan conjuntamente su orientación con opciones claras y firmes, encaminándose hacia un desarme nuclear progresivo y concordado. De este modo, los recursos ahorrados podrían emplearse en proyectos de desarrollo a favor de todos los habitantes, en primer lugar; de los más pobres.