“A pesar de las amenazas del Gobierno”

Autor: Elena Baeza Villena 

 

 

La cifra de objetores, para la asignatura de Educación para la Ciudadanía, ya ha rebasado el número de 15.000 a pesar de las amenazas del Ministerio de Educación. Los padres no vamos a permitir una intromisión inadmisible en los derechos a educar a nuestros hijos según nuestras convicciones, además de una falta de respeto y de falta de confianza grave hacia el profesorado que ha venido educando a nuestros hijos en valores de libertad y que ahora también van a ser obligados a educar según los criterios partidistas de un Gobierno, que no respeta la Constitución, ni a los padres.

Ante una asignatura inaceptable tanto en la forma como en el fondo, hay que recordar que la gravedad de la situación no permite posturas pasivas ni acomodaticias. Los padres tenemos el derecho de recurrir a todos los medios legítimos para defender la libertad de conciencia y de enseñanza. Ninguno de tales medios legítimos puede ser excluido justamente en ninguno de los centros en los que se plantea este nuevo desafío: ni en los centros estatales ni en los de iniciativa social. Cuando está en cuestión un derecho tan fundamental como el de la libertad de conciencia y de enseñaza.

La función del Estado no es de “imponer concepciones éticas sino la propia conciencia” ha dicho el secretario de la Congregación para la Doctrina de la Fe, monseñor Ángelo Amato.

La Iglesia y los que formamos parte de ella, nunca estaremos contra leyes justas, pero sí contra las que ataquen los derechos fundamentales de las familias, la conciencia y la fe de los ciudadanos. Porque el Estado no puede obligar a una persona a actuar en contra de su conciencia, ni impedirle actuar conforme a ella